Tratado sobre la espada: Parte 2 (L5R)

"Frío sopla el viento del norte

Gruesa cae la nieve

Sé amable conmigo, ámame

Toma mi mano y ven conmigo

Así lo medita, así lo pondera -

No hay tiempo que perder

En los bosques hay un claro de robles

Y en los páramos un cisne

Vestido con plumas blancas de la cabeza a los pies;

 Una Dama hermosa como el jade..."

Canción de Dama Doji

Actitud mental:

Observar sin mover los ojos, aguzar la mente tanto como el cuerpo, debe potenciarse la práctica y refinamiento del sexto sentido para obtener un control total en la actitud mental de uno mismo. Tanto en tiempos de paz como de guerra la actitud debe ser la misma - refinada, noble y disciplinada. Descubrir la verdad desde el exterior - tomar un punto de vista amplio y aguzar la mente hasta que hallas la verdad en todas la cosas. Incluso cuando el cuerpo está descansando, la mente debe estar controlada y en un estado de concentración. Sigue la senda de varias artes y habilidades, amplía tu conocimiento del mundo y no te engañarán. Si tu mente es fuerte, tu espíritu nunca será doblegado por tu condición física, ni siquiera aunque estés exhausto o dolorido. Cuando se habla de "cruzar la extensión", puede ser el contexto de un pequeño lago o de un gran mar - puede ser una gran distancia o una corta. En el transcurso de una vida, uno debe cruzar muchas aguas - tanto el cuerpo como la mente deben estar preparados para el viaje. Para pasar por la vida, uno debe tener una mente aguda y un espíritu decisivo, de forma que todas las debilidades del cuerpo puedan ser superadas. El cuerpo es poco más que el bajel para el viaje. Debe ser forjado, pero la mente debe ser su guía, o el viaje fracasará antes de iniciarse.

Sobre el golpe con el cuerpo:

El cuerpo también es un arma. Aquellos que insisten en esgrimir dos espadas contra un único oponente han olvidado que el mayor alma es uno mismo. El Kenshinzo o maestro de la espada, debe dominar su propio cuerpo antes de siquiera tocar la espada - el cuerpo es la mayor arma que tiene uno. Relegarlo en favor de una segunda espada es estúpido. Te deshonra igual que si dos hombres golpearan al mismo oponente, y no te permite el pleno uso del cuerpo. La posición, la fuerza y el poder generado del Ki es la fuerza fundamental contra la que ningún oponente puede resistir. Cuando se ataca a una fuerza mayor, uno debe usar sabiamente la estrategia y golpear cuando el oponente es más débil. Si el oponente lleva dos espadas, parece fuerte, pero ha olvidado el significado de la verdadera fuerza. Oculta su cobardía detrás del acero, y no es más que una casita de papel tras un muro de piedra. El arma más poderosa que tiene un guerrero no es el acero de su espada: es la verdadera fuerza del valor, la autentica espada del Bushido. Entre otras escuelas algunas son partidarias de utilizar dos espadas. En mi escuela eso es señal de cobardía. Los intentos de lograr la victoria con unas pulgadas extra de acero son señal de debilidad de espíritu. Aunque los que estudian en una escuela así puedan racionalizar esa senda, tales racionalizaciones no tienen sentido cuando se las ve a la luz de la verdadera senda del Bushido. No me desagrada la técnica de las dos espadas, solo el espíritu que lleva a la preferencia de las dos espadas. Es una verdadera debilidad, una debilidad del alma. ¿ Es imposible que un hombre gane a dos oponentes ?, hay muchos ejemplos en los que un hombre a derrotado a dos o más. En mi escuela de Iaijutsu no nos gusta un espíritu tan estrecho. Esto debería ser estudiado con mucho cuidado...

Extraído de: "The way of the Crane", Legend of the five rings, 1st Edition