Si os acordáis, a principios de verano, Guillermo no subió un post muy interesante acerca de un restaurante Ninja en Nueva York. Pues bien, en una de estas de ir arriba y abajo explorando este mundo, pude pasarme con mi hermana por ese restaurante, la experiencia valió mucho la pena y fue algo así:
Tras salir del metro de la ciudad, nos encontramos en una calle relativamente tranquila en la cual, según el mapa de la web del restaurante se encontraba este, a diferencia de cualquier otro restaurante que podamos imaginar, este estaba relativamente camuflado, es decir, visto de fuera y a distancia no parecía nada más que un portal de una casa ( y yo pasé de largo :P), pero una vez te fijabas, te dabas cuenta que el interior perecía la entrada de una cueva con una luz muy suave.
La cena estuvo llena de espectáculo ya que muchos de los platos que se pedían, tenían una presentación especial que incluía fuego, humo o incluso armas como espadas o estrellas. Por ejemplo, uno de los platos que pedimos iba presentado en un bol con un kodachi que al retirarlo con un grito ninja (era como estar en kendo ;p) activaba una trampa de humo y todo el plato se llenaba de este.
A parte del espectáculo que ya había de por si entre los platos y el camarero de repente apareciendo por sitios raros y pegándote un susto, también contamos con la presencia de un mago ninja que hizo unos cuantos trucos de magia muy chulos.
Al terminar la noche e irnos, también hubo alguna sorpresa a la hora de marcharse que hizo que más de una que yo me se pegara un buen salto :D
Y eso es todo!!
Personalmente os recomiendo que si tenéis la oportunidad, vayáis a ese restaurante. El espectáculo que ofrecen está muy bien y la comida también está bien. Igual el precio es un poco alto, pero es lo que pagas por la aventura.
Muchas gracias por compartir tus experiencias, espero que la comida haya estado rica.
ResponderEliminarMil gracias, y pasalo bien por tierras anglosajonas!
ResponderEliminarNos vemos...