miércoles, 7 de enero de 2015

Reflexión: Tres mejor que dos

Como era de prever, lo bueno se ha terminado. Ya estamos de vuelta a la realidad, las navidades han pasado y con ellas las vacaciones, así que no queda otra que amoldarnos a la realidad e intentar disfrutar de lo que está por venir.

Por mi parte voy a intentar aligeraros un poco la carga con una pequeña reflexión para empezar el año, un pensamiento de esos peregrinos que a veces se me ocurren, quizás de esta forma os podáis olvidar durante cinco minutillos de la depresión postvacacional centrando vuestra ira en mi persona xD.

A pesar del título no, no os voy a hablar de ese amigo mío que una noche de parranda conoció a dos mellizas, aunque es una gran historia creo que no es tema para el blog, al menos no por el momento, quizás algún día de esos que no se me ocurre nada que contar... 

Después del omitible párrafo anterior entremos en materia. Lo habitual en los entrenamientos de Aikido es practicar por parejas o en grupos, hoy quiero romper una lanza (o una espada, o un hacha, o lo que sea, el caso es romper algo) en favor de esas maravillosas clases de practicantes impares.

Si amigos si, soy un fan incondicional de las clases impares, esas en las que hay que montar una tresena para que nadie se quede colgado. Son varios los motivos por los que soy ferviente defensor de los grupos de tres sobre el tatami y creo que es una maravillosa forma de practicar, mucho mejor que por parejas, y os voy a exponer cinco motivos para defender mi postura:

  1. Tori no tiene tiempo a penas para pensar y tiene que esforzarse en realizar técnica sin pensar demasiado y sin el estrés del Randori.
  2. Uke recupera físicamente mientras el otro compañero ataca, así siempre estará más fresco para el siguiente ataque.
  3. Las cuatro repeticiones van mucho más rápido por lo que en general cada uno tendrá más ocasiones para trabajar tanto de Uke como de Tori.
  4. El tercero en discordia, cuando no tiene que atacar ni defender, puede ver el trabajo de Tori y de Uke para fijarse en los detalles y luego intentar aplicarlo en su turno.
  5. Aumenta la percepción espacial de los practicantes y el timming al tener que coordinarse para no generar situaciones de riesgo entre ellos.
Y estos son un poco, a grandes rasgos, mis principales motivos, por supuesto estoy abierto a debate, aunque viendo el día que es hoy, dudo que nadie tenga ganas de participar de tan sesuda charla, o me equivoco?

6 comentarios:

  1. Estoy de acuerdo con todos los puntos Guillermo, me gusta mucho practicar de a tres, y encantada de que vuelvas a estar todos los días
    un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A ver si cojo la rutina rápidamente que si no esto puede ser muy duro... xD

      Un abrazo Carina.

      Eliminar
  2. Interesante reflexión, no había caído en ello.
    Dominique

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo lo llamo reflexión pero no pasa de pensamiento fugaz, sería totalmente normal qu enadie hubiera pensado en ello jamás jejeje. Muchas gracias Dominique.

      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Buenos Dias, Guillermo,
    Porsupuesto, este és un de los aspectos de la práctica, Pero, con todo respeto a tu opinión, aprendí con los escritos sobre O'Sensei que és importante tener conciencia del movimiento, del fluxo de Ki y de la respiracion libre ( en expiración), como nos explicaba, también, Yamada Shihan, Noro Shihan y Kawanabe Shihan ( por esto entrenamiento en parejas o solo). Creo que todas las formas son muy importantes, así como el entrenamiento a três.
    Muchas Gracias por compartir tu reflexión con nosotros.
    Abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues no seré yo el que contradiga a los grandes maestros del Aikido, muchas gracias por el aporte Ricardo!!!

      Un abrazo.

      Eliminar