La semana pasada publicó Carina una interesante reflexión en su blog que me gustó mucho, podéis leerla pinchando aquí. El caso es que dándole vueltas llegué a la conclusión de que mi punto de vista sobre mi camino en el Aikido, desde mi corta experiencia, se podría resumir con parte de una estrofa de una canción de Extremoduro que dice así: " ...solo quiero que la ola que surge del último suspiro de un segundo me transporte mecido hasta el siguiente."
La clase del lunes giró en todo momento en torno al ataque Kata Dori, lo que se conoce como un monográfico en toda regla. Estuvimos practicando Ikkyo en Omote casi todo el rato.
Sensei Monreal iba desgranando la técnica paso por paso, en estático y en dinámico, e íbamos realizando esos pasos poco a poco para ir cogiéndole el truco y terminar haciendo lo más decentemente posible la técnica.
Hicimos una pequeña pausa para coger el Jo y realizar una tanda completa de múltiples repeticiones de la Kata de los 13 movimientos de Saito Sensei.
Y para terminar, vuelta al Kata Dori en grupos de cuatro para realizar un Randori. Se trataba de ejecutar cualquier técnica que nos viniera a la cabeza, con la premisa de que Uke no llegara a realizar el agarre en medida de lo posible. Se vieron cosas muy curiosas de improvisación jejejeje.
Buenos días Guillermo
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir mis reflexiones y tu frase da la sensación de fluir, que es lo que debemos hacer en aikido, me deberías ver ahora, estoy practicando la paciencia en el dojo al que volví, pensando en un artículo, aunque tal vez algunos no lo entiendan, bueno aunque no está dicho que lean mi blog o se vean reflejados en el artículo ;)
Muy buena clase otra vez, un día tengo que ir para allá,
un abrazo
En todo caso muchas gracias a tí por hacernos partícipes de tus reflexiones en voz alta. Me da la sensación que tienes paciencia más que de sobra para cualquier cosa, no obstante estaré atento a un posible post al respecto por tu parte ;-). Aquí te esperamos con los razos abiertos cuando quieras visitarnos, y si no me crees pregúntale a Alexandra!!! xD
EliminarUn abrazo Carina.
Hola, Guillermo,
ResponderEliminarMuy bonita esta frase, así como lá reflexión de Carina.oienso que fue una excelente clase, deben ser muy buenas las enseñanzas de Sensei Monreal; és lo que nos transmite a través de tus relatos.
Abrazo fuerte.
Me alegra mucho que esa sea la sensación que transmito al relatar los entrenamientos porque es fiel a la realidad. Cuando quieras ya sabes que estás invitado a practicar con nosotros.
EliminarUn abrazo Ricardo.