Crónica de mi examen de 1er Kyu en Villava, 7 de junio 2014

Y por fin llegó el día del examen, mucho tiempo preparándolo, muchas horas dedicadas y mucho esfuerzo invertido, mío y de otras tantas personas, para quince minutos en los que mostrar lo mejor y más dignamente posible todo lo aprendido y trabajado durante el año.

Y lo cierto es que guardaré para siempre un grato recuerdo de este examen, que comparado al infierno que fue el azul, lo he disfrutado a cada momento, y no solo en la preparación si no también en la ejecución, con gran tranquilidad y alegría, saboreando cada momento sobre el tatami y cada técnica.

Por supuesto gran parte del mérito de todo esto lo tiene Mariaje, que no solo ejerció de diligente uke durante el examen, si no que se ha preocupado de enseñarme lo mejor que ha sabido, que es mucho, y ha invertido en ello mucho tiempo y sudor, espero que lágrimas no... xD. Además era su estreno como uke en un examen, y puesto que el 1er Kyu es un marrón, agradecimiento y enhorabuena por partida doble.

Otra gran porción del éxito corresponde a todos los Maestros y compañeros que día tras día entrenan junto a mi y me enseñan mucho, desde el 6º Kyu hasta el 6º Dan, todos ellos me aportan mucho dentro y fuera de los tatamis.

Y el resto de méritos, que no es poco la verdad, pertenece a gente como Laura, mi madre, el Kutxo, Carina, Ricardo Amorim, mi compinche Raúl, Sensei Traver, Adrià, Edu y algunos que me dejo seguro de nombrar, gente que de una forma u otra, sin compartir tatami, me animan y me apoyan cada día.

Bueno, si después de todo este melodrama de dedicatorias todavía queda algún lector por ahí que no se haya puesto a vomitar arco iris y osos amorosos, os dejo una selección de fotos, las últimas ya de esta tanda de exámenes, pero tranquilos, que aún quedan muchas crónicas más.. MUAHAHAHAHA!!! (risa de malo).