Las crónicas de Adrià (Episodio 10)

Hola!!!!

Esta semana ha sido una semana de fiesta!! (ok, como si no lo fueran todas…) A parte del trabajo, este fin de semana fue el cumpleaños de dos de mis compañeros de piso, y eso se ha traducido en algo así como: El viernes tuvimos una gran cena en casa con muchos amigos y luego los que tuvieron más energía salieron a un club, al día siguiente, fuimos a comer a un restaurante coreano, que no sé si por nuestra zona son así, pero aquí en china, todos tienen una barbacoa en medio de la mesa con lo cual, la comida se convierte en toda una experiencia!

Por la noche, tocó otra fiesta en casa, la cual terminó cuando los vecinos vinieron a quejarse y de allí migramos al club Zeal que si os acordáis fue al que fuimos para el año nuevo chino. Para redondear el fin de semana, el domingo fue Saint Patrick’s day! Así que tocó un poco más de fiesta!!

Cambiando de tema, durante toda la semana en Wing Chun, estuvimos trabajando sobre lo que habíamos visto en la sesión de sparring de la semana pasada y básicamente nos hemos centrado en suelo y patadas. Trabajamos caídas y como controlar a nuestro oponente desde el suelo cuando el permanece de pie, claro está, si podemos levantarnos esa será la mejor opción, pero.. y si no podemos? Entonces igual nos interesa llevarlo a nuestro nivel, con lo cual, trabajamos también barridos y formas para controlar el oponente en el suelo. También hemos trabajado formas para contrarrestar patadas a parte de la mítica de entrar hacia la guardia de nuestro oponente utilizamos las piernas para bloquear o algunas posiciones con los brazos proyectados. Igual que como haríamos en Aikido u otra arte marcial, se practica tanto la técnica como el ataque, así que se aprende el doble :)

Y ya es hora de que os cuente un poco más sobre nuestra historia!! Os acordáis que lo dejamos después de que el ejercito quemara el templo del norte? 

La dinastía Quing, que estaba llevada por la gente de la Manchuria, mantuvo una gran presión sobre los disidentes Ming. Eso hizo que el descontento y la animosidad crecieran contra la gente de la Manchuria y como resultado, muchos luchadores empezaron a crear y unirse en distintas sociedades secretas que deseaban restaurar la dinastía Ming. El hecho que se crearan tantas sociedades secretas, es el precursor que hizo que naciera el Wing Chun Kuen y muchas otras artes marciales chinas. Según me han contado, uno de los primeros propósitos del Wing Chun era que fue creado para acabar con los traidores, por eso es tan efectivo y siempre ataca.

Después de lo que había pasado en el norte miles de personas se retiraron hacia el sur del país y Taiwán. Aún que los luchadores fracasaron en su intención principal de presentar batalla otra vez, consiguieron una cosa. Fueron capaces de difundir las doctrinas de lucha Shaolín por todos los rincones de China. Eventualmente, muchos de los monjes supervivientes del ataque al templo Shaolín del norte, buscaron refugio en el templo Shaolín del sur, el cual no era reconocido por sus artes marciales. Este se encontraba (por lo que parece en las excavaciones) en la provincia de Fujian, cerca de Guanzhou.

Los refugiados no tardaron mucho en reorganizarse con el objetivo de hacer caer a la dinastía Quing, pero claro…, los otros empezaron a darse cuenta de la creciente amenaza que esto suponía y del gran peligro que representaban las grandes habilidades marciales de este grupo y de la continua evolución de sus sistemas de lucha.

De este modo, los de la Manchúria, decidieron exterminar a los monjes Shaolín para que no pudieran propagar sus artes marciales ni sus ideas disidentes. Finalmente el templo Shaolín del sur siguió la misma suerte que el del norte y terminó completamente quemado y destruido.

Aquí es donde nuestra historia se divide, y donde en los otros posts veréis  cuál es la que os gusta más.

Hasta la semana que viene!!